Han pasado 800 años exactos desde cuando el joven de 25 años fray Antonio, que había enfermado, se embarcó en Marruecos para volver a casa, a su Portugal natal. Sin embargo, los vientos contrarios llevaron la nave hacia otros lugares, acabando en un rocambolesco naufragio en la playa del promontorio de Capo Milazzo (Sicilia), posteriormente llamada "Bahía de San Antonio". Allí fue asistido por los pescadores locales y después por los hermanos franciscanos de Messina, con lo cuales, recuperado, llegó al cabo de algunos meses a Asís, para encontrar al fundador de la Orden, el hermano Francisco.
El sábado 27 de marzo, dentro del marco del proyecto “Antonio 20-22” que recorre las principales etapas de este importante aniversario antoniano, en la encantadora bahía siciliana se llevó a cabo la evocación del naufragio del Santo.
LAS IMÁGENES DEL “NAUFRAGIO”
Recorremos en la galería fotográfica de esta página los momentos principales de la sugerente e inédita celebración (fotografías: Antonio La Malfa/Antonio20-22), solo televisiva a causa de las restricciones anticovid.
- Una delegación de frailes llegados desde Padua y presidida por el rector de la Basílica del Santo fray Olivero Svanera, llevó a Capo Milazzo una reliquia mayor de san Antonio, protagonista de la celebración.
- El busto con la reliquia fue subido en el Puerto de Milazzo a una embarcación de la Guardia Costiera que realizó el recorrido del cabo y llegó a la bahía.
- Cuando llegó a la playa que está debajo del santuario se hizo un momento de silencio y de oración, interrumpido por la acogida festiva de algunos niños en nombre de los habitantes de Capo Milazzo.
- El "Santo" subió por el alcantilado, llevado por los isleños, y llegó al santuario de la cueva para una breve celebración religiosa.
- Sobre las aguas, debajo del santuario rupestre, se ha colocado la instalación artística de inspiración antoniana "Voca me" de Mariagrazia Toto; realizada con trozos de madera de las barcas de los pescadores locales. La obra representa el tema de la acogida hacia los náufragos y la esperanza que sobrevive a cualquier tempestad.
UNA FECHA IMPORTANTE
No sabemos el día exacto de la llegada de San Antonio a Capo Milazzo, pero la fecha elegida, el 27 de marzo, tiene un gran valor simbólico.
El 27 de marzo del año pasado, en Roma, tuvo lugar un momento de oración querido por Papa Francesco para animar al mundo entero ante la amenaza de la pandemia. Bajo una lluvia intensa, en una Plaza de San Pedro desierta, el Papa comentó el pasaje de Marcos 4,35-41, la tormenta que golpeó la barca de los apóstoles en el lago de Tiberíades, dijo: «Nos dimos cuenta de que estábamos en la misma barca, todos frágiles y desorientados; pero, al mismo tiempo, importantes y necesarios, todos llamados a remar juntos, todos necesitados de confortarnos mutuamente. En esta barca, estamos todos».
La celebración quiso de esta manera recordar, además del naufragio de san Antonio, también a todas las víctimas de la pandemia, a los inmigrantes muertos en el Canal de Sicilia y a los muchos “náufragos” materiales y existenciales que se han consumido en este tiempo de pandemia.
EL VIDEO DEL “NAUFRAGIO”
La grabación completa del evento está disponible en el canal YouTube "Messaggero di sant'Antonio".
Es posible habilitar los subtítulos.
(Atención: la retransmisión en vivo empieza en el minuto 5' 37'', la duración total del evento es de 1 hora y 20 minutos aproximadamente)